Es increíble la variedad de servicios que puede ofrecer un pocero. Gracias a los sistemas y equipos con los que se cuentan, es posible realizar estás labores sin necesidad de hacer zanjas. La pocería sin zanja es una maravilla si buscas reparar, sustituir piezas e identificar fallos. Facilita el trabajo del pocero Madrid y aumenta la seguridad en cada trabajo.
En las siguientes líneas se describen algunas de las razones de este tipo de sistemas que ha dejado de lado la pocería tradicional. Te explicaremos por qué se ha convertido en una técnica cada día más demandada.
Cuando buscas innovación, la pocería sin zanja es un sistema que está diseñado para rehabilitar o reparar de manera total o parcial tuberías.
En la actualidad, es muy popular la ejecución de la pocería sin zanjas en urbanismos y diferentes ciudades de España. Se aplican procedimientos que permiten solventar incidencias como el cierre de calles y carreteras debido al corte de pavimento.
Un buen pocero Madrid cuenta con equipos tecnológicos especializados que le permiten realizar reparaciones de tuberías sin obras y que se adapta a cada tipo de problema. Por otra parte, hay que mencionar que posee conocimientos, experiencia y pericia que le permiten aplicar el método más indicado según sea el caso.
Lo peculiar de este tipo de proyectos es que, aparte de no ser necesario realizar obras, favorece un ahorro de tiempo, molestias y costes.
El hecho de no tener que hacer zanjas, romper suelos o hacer excavaciones en cualquier trabajo de pocería, reduce de manera drástica los tiempos de ejecución de las obras. Todo esto sin contar que se reducen al mínimo o desaparecen escombros, polvo y ruido.
En cuestión de horas se pueden hacer rehabilitaciones a diferencia de una obra tradicional que supone cómo mínimo una jornada de trabajo. Esto es una gran ventaja para el propietario de una vivienda o una comunidad de vecinos porque el tráfico en la zona en cuestión no se verá afectada.
A diferencia de la pocería tradicional, en el sistema sin zanjas se emplean materiales de mejor calidad y acabados perfectos. Estos son más resistentes y duraderos, pudiendo tener una vida útil de hasta 70 años. Esto es algo sumamente increíble.
Usar buenos materiales y emplear una tecnología punta de mano de profesionales, permiten obtener resultados meticulosos que garantizan una eficacia máxima en cada intervención.
Si comparas los costes que supone una obra de sustitución de tuberías con técnicas tradicionales con una pocería sin zanja, notarás que en muchos casos son similares e incluso hasta más económicos.
Es verdad que los materiales empleados son más costosos, pero se produce un ahorro considerable al eliminar la obra civil. En este caso, por lo general se abren zanjas, se rompe el pavimento o se ejecutan obras de gran envergadura.
Podemos decir que, tanto los materiales como los procesos que se utilizan en la pocería sin zanja, son, además de higiénicos, respetuosos con el medio ambiente. No se emplean agentes contaminantes.
Este es un método dónde se utiliza una manga de fibra de vidrio y resinas de poliéster que es curada mediante agua caliente, rayos UVA o luz UV LED, garantizando el equilibrio ambiental.
Podemos decir que con el sistema de pocería sin zanja se minimizan los impactos negativos que conllevan la rehabilitación de tuberías en mal estado. Es el sistema más novedoso, cómodo y rápido que existe en la actualidad.