Tuberías de Plomo ¿Es obligatorio cambiarlas?
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19 julio, 2023Mitos sobre la pocería sin zanja
¿Es posible realizar reparaciones y renovaciones en las redes de saneamiento sin necesidad de realizar excavaciones? La pocería sin zanja es una técnica innovadora que ha revolucionado la forma en que se abordan los problemas de las tuberías subterráneas.
Sin embargo, a medida que esta técnica se ha vuelto más popular, también han surgido algunos mitos y malentendidos en torno a ella. Por eso, en este artículo, desmitificaremos los conceptos erróneos más comunes sobre esta famosa técnica.
Como poceros en Madrid te ofrecemos información precisa y de confianza para que puedas comprender mejor sus beneficios y tomar decisiones informadas cuando se trata del mantenimiento y reparación de las redes de saneamiento.
Uno de los mitos más comunes sobre la pocería sin zanja es que puede causar daños a las estructuras subterráneas existentes, como cimientos, tuberías o cables. No obstante, es importante destacar que esta técnica se ha desarrollado precisamente para minimizar el impacto y evitar daños a las estructuras subterráneas.
A través del uso de tecnología especializada, como la perforación dirigida o el corte hidráulico, se pueden crear aberturas precisas y controladas en el suelo sin comprometer la integridad de las estructuras circundantes.
Además, los equipos de profesionales altamente capacitados y con experiencia aseguran que se sigan los protocolos adecuados para evitar cualquier tipo de daño accidental.
Existe la idea errónea de que la pocería sin zanja es una opción más cara en comparación con los métodos tradicionales de excavación.
Sin embargo, esto no siempre es cierto. Aunque puede haber casos en los que pueda tener un coste ligeramente más alto debido a la tecnología especializada y los equipos requeridos, en muchos casos, esta técnica puede resultar incluso más económica a largo plazo.
Al evitar la necesidad de realizar excavaciones extensas, se reducen los costes asociados con la mano de obra, la reposición del terreno y la restauración de las superficies afectadas. Además, esta técnica a menudo permite completar el trabajo de manera más rápida y eficiente, lo que puede ahorrar tiempo y dinero en comparación con los métodos tradicionales.
Otro mito común es que este tipo de trabajos no invasivos solo son aplicables en ciertos tipos de terrenos. Sin embargo, la realidad es que esta técnica se adapta a una amplia variedad de terrenos y condiciones.
Ya sea en suelos blandos, rocosos, arenosos o arcillosos, la pocería sin zanja puede adaptarse a las características del terreno. Los equipos especializados y las técnicas adecuadas se utilizan para superar los desafíos específicos de cada tipo de terreno. Aseguran que las reparaciones y renovaciones se realicen de manera eficiente y efectiva.
Un mito extendido es que la pocería sin zanja solo es útil para reparaciones menores y no puede abordar problemas más grandes o complejos en las redes de saneamiento. La realidad es que este sistema ha avanzado significativamente en los últimos años y puede abordar una amplia gama de problemas: Desde pequeñas reparaciones hasta renovaciones completas de tuberías.
Las técnicas como el revestimiento estructural y la perforación dirigida permiten solucionar problemas más grandes, como fisuras extensas, corrosión generalizada o colapsos parciales de tuberías. Además, sin necesidad de realizar excavaciones masivas.
Se ha demostrado que es una opción viable y efectiva incluso en situaciones más complejas. Ofrece beneficios como tiempos de finalización más rápidos y menores interrupciones para los propietarios o usuarios finales.
En definitiva, la pocería sin zanja es una opción muy recomendable. A través de una correcta información y orientación, podemos aprovechar sus ventajas para el mantenimiento y reparación de las redes de saneamiento.
Las tuberías comunitarias, que abastecen de agua a múltiples viviendas o edificios, pueden generar problemas que afecten a numerosas personas al mismo tiempo.
La primera acción a tomar en caso de rotura de una tubería comunitaria es notificar de inmediato a la empresa encargada del suministro de agua. Será su responsabilidad resolver el problema lo más pronto posible.
Es esencial proporcionar información detallada acerca de la ubicación de la avería, su magnitud y los daños que está ocasionando. El objetivo es permitir que los técnicos en fontanería se desplacen rápidamente al lugar y tomen las medidas necesarias.
Mientras se espera la llegada del equipo de reparación y si la avería es visible y accesible, se puede intentar controlar el flujo de agua cerrando la válvula de paso más cercana al tramo dañado.